“Hamada” es la palabra árabe que define el tipo de desierto pedregoso, lugar particularmente difícil para la vida y la esperanza. En medio de ese desierto de la nada que es el Sahara se crían las generaciones a las que Marruecos negó el país en 1975. Hamada traza un inusual retrato de un grupo de amigos que viven en un campamento de refugiados en medio del desierto del Sahara. Un campo minado y el segundo muro militar más grande del mundo separan a estos jóvenes de su tierra natal, de la que sólo han oído hablar en las historias que les cuentan sus padres. Juntos, usan el poder de la creatividad y la diversión para denunciar la realidad que los rodea y expandirse más allá de los límites del campamento.
El tiempo presente pasa matando las horas pero eres joven y hay amigos, hay risa necesaria, hay ideas rebeldes y hay sueños inconformistas dichos muy alto y claro. Con vitalidad, humor y situaciones inesperadas. Se destaca especialmente el papel de las mujeres, que tienen un protagonismo preponderante en el día a día.
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